
Esta vez pensaba que iba a ser posible. Sabía que había pocas plazas, que éramos muchos, que no era fácil, que no las tenía todas conmigo...pero después de hacer los exámenes y salir tan contenta era difícil no hacerse ilusiones. De hecho, no solo estaba segura de que tendría buena nota sino que además casi estaba segura de que tendría plaza. Así que el golpe ha sido tremendo cuando el resultado no ha sido el que esperaba: me he quedado, con un 7,5355 de nota que sumado a los méritos ha quedado en 7,03, en el puesto 12 de mi tribunal. Y han dado 11 plazas. L peor es que es la tercera vez que me quedo en puertas.
Hasta ahora no he tenido ganas ni de blog, ni de nada, pero creo que es bueno pasar página también desde aquí, donde me asomaba y todavía quedaba abierta la duda sobre mis resultados. Espero que tras el descanso veraniego venga de nuevo la ilusión, aunque ahora lo veo difícil...Es muy desilusionante constatar que tanto esfuerzo y tanta ilusión han quedado en saco roto. Por mala suerte, tal vez. Pero también porque no se ha valorado lo suficiente el trabajo que tan ilusionada me tenía. Y eso, inevitablemente, desengaña, desgana, desmotiva...