
Procedencia de la imagen de Andrzej Kuziola
¿Y si despierto
y todo es diferente
a lo que ansío?
Si abro los ojos
y nada es como espero,
¡Que no me besen!
¿Y si despierto
y el mundo es una pena?
Mejor dormida...
Beso de sapo,
saliva pegajosa:
prefiero el sueño.
Ante la duda,
dormida para siempre.
No quiero besos.
..........
La Bella Durmiente del bosque y el príncipe
La Bella Durmiente cierra los ojos pero no duerme. Está esperando al príncipe. Y cuando lo oye acercarse, simula un sueño todavía más profundo. Nadie se lo ha dicho, pero ella lo sabe. Sabe que ningún príncipe pasa junto a una mujer que tenga los ojos bien abiertos.
La bella del bosque durmiente
- Decidme, noble anciana, por vuestra vida:
¿yace aquí la princesa que está dormida,
esperando ha dos siglos un caballero?
- La princesa de que hablan en tu conseja,
¡soy yo!... pero, ¿no miras? Estoy muy vieja,
¡ya ninguno me busca y a nadie espero!
- Y yo que la procela de un mar de llanto
surqué... ¡Yo que he salvado montes y ríos
por vos! - ¡Ay! caballero ¡qué desencanto!
... Mas, no en balde por verme sufriste tanto:
tus cabellos son blancos, ¡como los míos!
Asómate al espejo de esta fontana,
¡oh pobre caballero!... ¡Tarde viniste!
Mas, aún puedo amarte como una hermana,
posar en mi regazo tu frente cana
y entonar viejas coplas cuando estés triste...